Relación intestino – estrés
Seguramente has pensado o escuchado en algún momento de tu vida esta frase que dice “siento un nudo en el estómago” o quizás también has sentido mariposas en el estómago.
Bueno, pues aquí te quiero contar cómo sucede este proceso según la ciencia.
Primero, te quiero explicar de una manera sencilla cómo funciona el estrés en tu cuerpo.
Imagina que tu sistema nervioso tiene un interruptor, cuando se ENCIENDE el interruptor se activa el sistema nervioso simpático, este es el que te prepara para la acción, para pelear o volar, en últimas el que te produce el estrés. Cuando estamos bajo este sistema nuestro cuerpo reduce la digestión de los alimentos para conservar energía y así poder sobrevivir.
Cuando este interruptor se APAGA se activa el sistema nervioso parasimpático, este es el que te prepara para descansar y digerir, controla la digestión, salvación y las ganas de ir al baño, dentro de otras actividades.
Entonces, tu cuerpo puede solamente estresarse o digerir, pero no puede hacer las dos cosas al tiempo. Lo que quiere decir que los procesos que tu cuerpo necesita realizar para que haya una correcta digestión de los alimentos no los podrá ejecutar si tu cuerpo está bajo condiciones de estrés.
TIPOS DE ESTRÉS
Quiero que sepas que el estrés es una sensación normal. Existen dos tipos principales de estrés:
- Agudo: este es el tipo de estrés ocasional, de tiempo corto. Como por ejemplo el hecho de ponerte nervioso(a). Ayuda a controlar las situaciones peligrosas. También ocurre cuando haces algo nuevo o emocionante.
- Crónico: este es de tiempo largo. Un estrés más prolongado. Cualquier tipo de estrés que continúa por semanas o meses. El problema con este tipo de estrés es que te acostumbras a él y no te das cuenta que es un problema hasta cuando tu cuerpo te comienza mandar señales, causando problemas de salud.
Ahora, te voy a contar sobre un concepto que ha ido tomando mucha importancia.
Resulta que el cerebro no actúa de manera independiente como se creía antes. Rigurosos estudios científicos han demostrado que existe otro jugador muy importante, y se trata del intestino.
Sí, ¡El intestino!
Tu cerebro e intestino se comunican constantemente, a este enlace se le denomina el eje cerebro- intestino.
Imagina que tienes una gran y crítica autopista que atraviesa tu cuerpo conectando el cerebro y el intestino, esta autopista va en doble sentido, y permite que estos dos órganos se envíen señales mutuamente.
COMUNICACIÓN INTESTINO-CEREBRO
La comunicación a través de esta autopista es esencial para mantener el equilibrio de tu intestino y cualquier otra parte del cuerpo. Entonces, dentro de esa autopista existen varias rutas de comunicación que componen el eje cerebro-intestino pero la mas predominante es la que se conoce como Nervio Vago.
Photo: Wellcome Library
El nervio vago conecta el cerebro con casi todos los órganos de tu cuerpo. Es el nervio más largo que conecta el cerebro y el intestino y envía señales en ambas direcciones de tu cuerpo. Cuando el nervio vago es estimulado, este activa el sistema nervioso parasimpático haciendo que se apague el interruptor que te comente al principio, haciendo que todas las cosas divertidas que tu cuerpo necesita ocurran. Por ejemplo, descanso corporal, regulación de tu frecuencia cardiaca y la respiración.
Dentro del nervio vago se encuentran muchos neurotransmisores, que son sustancias químicas que transmiten mensajes de un lugar a otro, como si fueran un call center.
Por ejemplo, la serotonina, que también es conocida como la hormona de la felicidad y el bienestar, es producida tanto en el cerebro como en el intestino, pero la mayor parte (casi el 95%) es producida en el estómago! Wow!!! ¿Te lo imaginabas?
Otro neurotransmisor que se encuentra en el intestino es el Ácido Gamma Aminobutírico GABA, el cual ayuda a regular la actividad de tu cerebro y controla la sensación de ansiedad.
TU INTESTINO TAMBIÉN SIENTE
Lo interesante es que las emociones y sensaciones como, el estrés, la ira, alegría y ansiedad se pueden sentir en el intestino antes de que le hayas dado el chance al cerebro de procesar la emoción completamente. Por lo tanto, si en el pasado has experimentado mariposas en tu estómago cuando estás nervioso(a) o estás a punto de tomar una decisión muy importante es porque ya sabes que la conexión entre el cerebro y el intestino es real pero quizás no eras tan consciente de ello.
INDUCE A TU CUERPO A UN ESTADO DE DIGESTIÓN ADECUADA
Para terminar, te quiero compartir 5 maneras de como hacer para apagar este interruptor y que ayudes a tu cuerpo a que entre en un estado de relajación y digestión adecuada.
Es importante que sepas que el objetivo NO es eliminar el estrés 100% ya que esto no es posible, pero en cambio sí puedes comenzar a incorporar hábitos que te ayudan a alimentarte de una manera más consciente y tranquila.
- Técnica del Stress Free Plate. Con esta técnica quiero que intentes dejar tus problemas o preocupaciones en la puerta de la cocina o entrada de tu casa, o quizás en el computador de la oficina. Para esto, una buena opción es crear un frasco de preocupaciones o quejas, en este frasco vas a depositar aquellas preocupaciones o estrés que traigas del día. Las vas a escribir en un papel o simplemente hacerlo imaginariamente, luego ponerlas en el frasco y así sentarte de una manera más tranquila a comer.
- Mindfoodness. Llama tu cuerpo y mente al presente por medio de la respiración, inhala y exhala 4 veces, haciendo cada vez las inhalaciones más largas y profundas y trata de que la inhalación tenga la misma duración de la exhalación. En ocasiones estas tan concentrado(a) viendo una serie de tv o viendo el celular mientras comes que te olvidas de que estás digiriendo y poniendo alimento en tu cuerpo. Cuando esto sucede pasas por alto las señales que tu cuerpo te está enviando. Por lo tanto, intenta saborear cada bocado que pones en tu boca, siente si está caliente o frío, trata de experimentar su textura, su sabor, olor, etc. Usa tus sentidos!
- Gratitud. Se que este término se escucha por todos lados ahora, pero quiero que sepas que funciona y te ayuda a traer al presente. La gratitud, te ayuda a valorar más no solo el alimento que estás poniendo en tu cuerpo sino las manos que lo prepararon y los diferentes procesos por los que esta paso para que llegara a tu mesa.
- Break time. Intenta crear un momento de tu vida alejado del trabajo y aparatos tecnológicos para poder digerir bien tus alimentos. Recuerda que tu cuerpo requiere de un break para poder continuar con las tareas del día de una manera eficiente.
- Ambiente sano. Limpia la mesa donde vas a comer, aleja todas las distracciones, crea un ambiente agradable y motivador para alimentarte. Pon música que te traiga paz, prende una vela, si puedes comer afuera en contacto con la naturaleza no dudes en hacerlo. Si es el caso de que pediste un domicilio, intenta no comer en el mismo empaque que viene la comida que pediste, sírvela en un plato limpio y que te guste. La comida entra por los ojos también, entonces si luce agradable a nuestra vista la vamos a disfrutar mucho más.
No solo lo QUE comes es importante sino COMO lo comes también.
DISEÑA TU RUTA DE CAMBIO DE HÁBITOS INTESTINALES
Se dice que el intestino además de ser la clave para una buena salud es la clave para la felicidad.
Ahora bien, todo comienza en la digestión y es de vital importancia reconocer el rol del intestino en tu cuerpo. Pues allí es donde surgen la mayor parte de enfermedades que no te permiten estar bien. Mi rol como Health Coach especializada en salud intestinal, es acompañarte en el proceso de fortalecer tu intestino en pro de tu salud física y emocional.
Te gustaría comenzar a involucrar hábitos de vida saludables, reconectar con tu cuerpo y con los alimentos, optimizando tu salud y vitalidad? Te invito a que agendes una sesión gratis conmigo en el siguiente link:
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Muchas Gracias por leerme!
¡Mucho amor para ti!
REFERENCIAS:
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